Sin tregua




Despierto y no estás.
              La hierba es rocío
y el viento de acero.
Una huella de luz
               abrasa mis pies desnudos
con un trazo curvo.
Me conduce a ti
                a tu justa impaciencia.
Rumor de alientos
encontrándose en el alba sin sosiego
ni tregua.
                Aullido.




(Foto. Michael Ackerman)