Repente






Desde cada lado de la noche
tus dedos y los míos
rozan
         traviesos
nuestros sueños.

No sé quién de los dos
sumerge al otro
         en la voracidad
de la añoranza.

Despierto de pronto con la boca
húmeda
         nombrándote.




(Foto. Bill Brandt)